La última edición de la feria destaca por su enfoque dinámico y más inclusivo, donde se fusiona lo histórico con lo contemporáneo mientras abre puertas a nuevas perspectivas globales.
El renovado Grand Palais ha vuelto a convertirse estos días en un lugar de encuentro ineludible para la comunidad fotográfica, con la celebración de Paris Photo, la principal feria de fotografía del mundo.
Un evento donde cada vez tienen más cabida las miradas procedentes de distintos lugares del mundo, al tiempo que ofrece un diálogo entre las obras históricas y las perspectivas más contemporáneas, ampliando los horizontes de la fotografía y fomentando una conversación dinámica sobre el presente y el futuro del medio.
Fotografía de Ramón Masats expuesta en el París Photo: Ludmilla Tchérina, Madrid, 1964.
La Galería Alta, con sede en Andorra, presentó una contundente selección del archivo de Ramón Masats, donde se pudieron ver muchas imágenes inéditas de este gran maestro de la fotografía española.
A pesar de su vasta trayectoria, nunca se consideró un artista. France Info lo presentaba como “el Cartier-Bresson español desconocido”, subrayando su capacidad única para captar lo cotidiano con una mirada profunda y atemporal.
The latest edition of the fair stands out for its dynamic and more inclusive approach, merging the historical with the contemporary while opening doors to new global perspectives.
The renovated Grand Palais has once again become an unmissable meeting place for the photographic community, hosting Paris Photo, the world's leading photography fair.
This event increasingly welcomes viewpoints from various parts of the world, facilitating a dialogue between historical works and contemporary perspectives, thus broadening the horizons of photography and fostering a dynamic conversation about the present and future of the medium.
The Alta Gallery, based in Andorra, presented a compelling selection from the archive of Ramón Masats, showcasing many previously unseen images by this great master of Spanish photography.
Despite his extensive career, he never considered himself an artist. France Info described him as "the unknown Spanish Cartier-Bresson," highlighting his unique ability to capture the everyday with a profound and timeless perspective.